Plataforma Estatal por la Escuela Pública (de la que forma parte la Confederación de MRPs)
La plataforma estatal por la escuela pública denuncia que se están incrementando los ataques fascistas contra las organizaciones sociales que defienden los derechos de los ciudadanos y los servicios públicos, y exige a las autoridades que actúen poniendo fin inmediatamente a sus desmanes.
En los últimos tiempos se ha incrementado la presencia de grupos que exhiben su ideología fascista y que están actuando en muchos frentes para deslegitimar y atacar a los ciudadanos que no se resignan a someterse a unas políticas claramente regresivas que lesionan sus derechos y se movilizan de forma organizada y pacífica para defenderlos.
En el ámbito educativo, hemos detectado la presencia en algunas manifestaciones, concentraciones y otros actos reivindicativos de grupos organizados para, bajo la apariencia de luchar contra la situación actual, intentar reventar dichas actuaciones con métodos violentos que sólo pueden etiquetarse de fascistas. En ocasiones se limitan a generar enfrentamientos con los Cuerpos de Seguridad del Estado para que las noticias sean dichos enfrentamientos y así contribuir a un cuestionamiento fácil e injusto de los manifestantes. Pero también están desarrollando actos propios para denostar la imagen de aquellos a quienes dicen representar, como está pasando con el colectivo estudiantil en varias zonas del Estado, por ejemplo, en Oviedo, Málaga, Madrid o Sevilla con una manifestación que en el fondo se hace para acosar al Sindicato de Estudiantes. Todo esto, al mismo tiempo que ponen en marcha campañas de desprestigio de otras organizaciones para intentar deslegitimarlas a ellas o a sus dirigentes. Son los mismos métodos del pasado predemocrático, métodos fascistas que deben ser rechazados y denunciados.
Defenderemos siempre el derecho a manifestarse porque forma parte de nuestros derechos fundamentales, pero cuando algún colectivo fascista utiliza este derecho para atentar contra la Democracia y atacar a los ciudadanos, debemos exigir y exigimos que las autoridades públicas pongan freno a estas situaciones de forma inmediata y tajante. Además de mostrar la repugnancia hacia quienes así actúan, el Estado de Derecho debe actuar y defenderse de ellos, ya que, con sus conductas, evidencian un explícito e intencionado desprecio hacia determinados colectivos sociales y a la Democracia.
4 de febrero de 2014