Colectivo Diseñadorxs Activistas “Un mundo feliz” de Madrid
El colectivo Un Mundo Feliz es una demostración palpable de lo que significa ser diseñador-activista en la sociedad de la información (ver referencia del colectivo)
Contenido
Comenzaron Sonia y Gabriel, pertenecientes al colectivo “Un Mundo Feliz”, comentando la importancia del arte como instrumento para el activismo: el arte es algo intergeneracional, fácil de entender desde más de una perspectiva, con diferentes lecturas.
El arte supone el dejar que las otras personas piensen, que cada uno ve las cosas diferentes, hacer que la otra persona decida . Por todo eso es un instrumento para el activismo
Desde esa perspectiva de arte activista es necesario basarse en el intercambio: PRODUCIR material para que lo usen otras personas, lo que supone desde ponerse en contacto, usar lo aportado por otros artistas y ceder material propio
El activismo supone la utilización de métodos de protesta no violentos. Se puede ser activista de muchas formas, incluso “pasando” podría decirse que alguien es activista.
1ª parte: qué hace “Un mundo feliz”. (Placer-política, I)
En esta primera parte describieron los ponentes algunos rasgos que reunía el “arte-activista” en general.
Qué es el activismo
El activismo implica la autoexpresión, el poder realizar cosas que sean problemáticas. A veces es autoorganización , pero no siempre.
El activismo se basa en la acción directa, (organizada o no) y creativa. Eso no tiene por qué suponer agredir a otra persona. En ese sentido se discute bastante si el terrorismo es realmente activismo o no.
El “afectivismo” supone buscar a gente para compartir. No es activismo. Este debe estar impregnado de ética, reunir las tres características: franqueza, confianza, honestidad (SEA).
Problemas del arte y la estética
Este arte – activismo se mueve entre tres variables: el arte, la acción política en sentido amplio y la utopía. Ese triángulo puede desequilibrarse y lograr menos efectividad. Por ejemplo, por exceso de formalismo activista, olvidando la acción política. También porque solo se busque la efectividad política olvidando la utopía o porque se convierta en un experimento comunitario que deje de lado el arte.
Si tenemos en cuenta a quienes son actores en esta acción: diseñadorxs, ciudadanía y políticxs, también pueden producirse desequilibrios. Por ejemplo si solo intervienen la ciudadanía y quienes diseñan, puede llegarse a un “espectáculo comercial”.
Hay que huir del sectarismo, buscar cómplices, para conseguir algo concreto, que nos propongamos, teniendo clara la finalidad. No se trata de buscarlos para “ser radical”, como postura sin más. No se trata tampoco de hacer un seguimiento de alguien o algo a ciegas, al margen ya del propósito inicial. Con ese seguidismo podría llegar a perderse el horizonte. Podríamos caer en la demagogia, como en una especie de anestesia.
¿Es un trabajo social el activismo en el arte?
El activismo es, efectivamente, un trabajo social que produce fortalecimiento en las relaciones, pero a veces supone romper o aumentar las tensiones, romper para que aparezcan otros lazos.
Resulta difícil aunar el trabajo social y el activismo porque se tiende, en general, a la cohesión en vez de a crear situaciones problemáticas, provocadoras, que es el fin del activismo.
Debe haber una creatividad constante de la persona activista, unir praxis política y la estética.
Tipos de activismo
Hay muchos tipos de activismo:
- activismo como práctica cultural (modelo subjetivo),
- activismo como práctica autónoma (modelo indie) independiente
- activismo como práctica especulativa(modelo crítico) plantea problemas
- activismo como práctica revolucionaria(modelo radical)
- activismo como práctica militante (modelo de guerrilla) clandestino, suele basarse en las TICs
Hacemos muchas veces activismo. A veces supone llegar a situaciones críticas y diseñar, aunque luego no se llegue a realizar aquello que pedimos
Algunas pautas para el activismo:
Hace falta crear, copiar … utilizar cualquier material, lo que sea, aunque sea “cutre”. Todo es útil para ponerlo al servicio de lño que nos proponemos. En ese sentido hay que tener en cuenta que hay imágenes que siguen siendo significativas y nos pueden seguir sirviendo
Importa todo, la idea, la imagen, la mezcla, el collage visual, porque eso es lo que llega a un collage social de mezcla de perfiles. Es necesario echar mano de todo que es lo importante y no los autores.
Si eres activista lo que haces no es propiedad tuya, desde que haces pública tu obra es de todxs, aunque vaya firmada.
Es necesario elegir los códigos que entiende quien te va a recibir. Hay que apropiarse, llegar a entender, los espacios y tiempos adecuados y ponerlo en común, para comunicar mejor
Huir de lo críptico , lo cerrado, frente a lo crítico (Els Kurjpers). Es importante:
- El informalismo, el ser poco convencional.
- El dialogismo, llegar a más práctica, la contraimagen .. para empatizar, que llegue a la gente, antes que bsucar la calidad
Las reglas de poder (según Calinsky): hay que tener en cuenta que el poder está siempre ahí, una cosa diferente es quien lo ejerce.
Cercanía: hay que actuar con experiencias de alrededor
Romper esquemas pasa por no ser asimilado lo que implica un esfuerzo continuo.
La irreverencia es útil muchas veces porque desquicia la situación. Debería estar unida siempre a la diversión. La gente se aburre es muy importante buscar siempre el toque de humor
Hay que cambiar siempre bases elementales y ser creativo.
Es necesaria la constancia y la presión. Mantener vivas ambas cosas, sino no funciona.
Mantener el optimismo. Siempre hay razones para abandonar.
Creatividad: hay que demostrar el éxito de algo que consigues. No es solo un juego.
Hay que encuadrar la acción, a veces hay que dirigirse hacia las causas. No es lo mismo luchar contra la pobreza que contra quien genera esa pobreza, que resulta más complicado y conflictivo.
2ª parte. Gente con preocupación por educación + activismo (Placer-política II)
En esta segunda parte Sonia y Gabriel abordaron cómo al activismo llega al mundo educativo, de forma general.
El activismo puede darse en educación. Es posible enseñar ética a través de cualquier motivo, más si es cercano a algo suyo, mezclando intimidad – multitud con afectivismo-activismo.
Muchas iniciativas activistas pueden desarrollarse desde los centros. En la presentación de materiales de “Un mundo feliz” había opción de tener, por ejemplo, una exposición que pudiera recorrer los centros
Dos eran las ideas que pueden articular nuestra actuación:
Pensar sobre lo aparentemente sencillo.
Entender el educar como “dar las llaves” para que adelanten.
El activismo suscita, muchas veces, problema en el aula, se ve como manipulación. Realmente lo es como lo son otras formas de actuar). Criticar es un casi siempre un problema en educación en general. la única forma de que desapareciera el problema es haciendo pensar críticamente en el proceso de aprendizaje.
Como forma de aplicar en educación el activismo existen varias cuestiones importantes sobre las que reflexionar:
La queja no es rebelión. No debemos mantenernos en la queja, hay que generar creatividad y acción.
En educación, como en otros campos, hay que evidenciar el problema que queremos abordar y luego tratar de construir. Debe de irse captando variables para percibirlo de forma aislada. Puede ocurrir que lo que se haga sea contraproducente. Es importante saber cuándo ser activista)
En educación, específicamente, se actúa en colectividad. Habrá que plantearse si el consenso destruye la creatividad o no. Resulta difícil conseguir el equilibrio entre autoexpresión y organización. ¿Se destruye la provocación para llegar al consenso?. Hay espacios públicos que no son públicos, en los que no se puede hacer nada, se prohíbe todo. A veces la organización elimina la autoexpresión y la creatividad.
En las aulas plantear la creatividad y el arte junto supone romper las normas, crear otras perspectivas, crear interacciones nuevas. Las aulas tienen validez como espacios de creatividad artística
Más información
Conscientes de las posibilidades de difusión que ofrecen las tecnologías digitales y, especialmente, Internet, se mueven con enorme versatilidad en ese mundo pero también lo hacen en el del vídeo y en el del papel, siempre con los pies entre el diseño, el arte y las estrategias -eso, sí, pervertidas a conciencia- de la publicidad.
Con un desarrollado sentido de red, conectan con otros grupos de enfoque y perfil similares a los que les son propios y se muestran abiertos a una colaboración que no conoce fronteras.
Como confiesan sus miembros, surgieron por necesidad, por “poner un contrapeso en una balanza”, la de trabajar para un mercado con el que no en todas las ocasiones se está de acuerdo. (Raquel Pelta / monográfica.org)
Como los describiría Liz McQuiston si tuviese que referirse a ellos en alguno de sus libros, Un Mundo Feliz son los representantes de un “nuevo activismo”, “estrechamente emparentado con la acción cultural directa, la metodología del “hazlo tú mismo” y “con una cultura visual en vías de expansión que comprende tanto los proyectos profesionales como el graffiti callejero”. (Raquel Pelta / monográfica.org)
http://unmundofeliz2.blogspot.com.es/
http://pictopiabook.blogspot.com