Comunicado de la Plataforma de Escuela Pública, Laica y Gratuita- Foro de Educación en Castilla y León

Castilla y León en el tercer puesto de las tasas universitarias más caras.

Es un sistema educativo que progresivamente expulsa al alumnado con menos recursos.

Exigimos a la Junta de Castilla y León que disminuya las matrículas para pasar al séptimo puesto, de acuerdo al menos con nuestro PIB per cápita.

Tras las últimas elecciones autonómicas (26 de mayo de 2019) el nuevo Gobierno de Castilla y León quedó presidido por el Partido Popular, con María del Rocío Lucas Navas (PP) como Consejera de Educación. Con esto, se configuró un contexto político que ha mantenido una tendencia continuista de las políticas que se venían aplicando en torno a la educación pública.

Una de las políticas activas en materia de educación durante los últimos años ha sido la reducción, por parte de la Administración, de las tasas universitarias un 20%. No obstante, poniendo en contraposición a la subida de los últimos diez años, podemos observar que en el cómputo global se mantendría un 4% de subida. Junto a Aragón, Navarra y La Rioja, nuestra Comunidad se sitúa en el tercer escalón de tasas universitarias más caras, solo por detrás de Cataluña y la comunidad de Madrid. (Referencia: Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades).

Con todo ello, el acceso a los estudios superiores universitarios se ve afectado por una serie de barreras económicas que impiden al estudiantado con menos recursos económicos acceder a la Universidad pública. Recientemente, el Tribunal Constitucional ha reconocido el derecho de las universidades privadas a la concesión de becas y ayudas al estudio en las mismas condiciones que las universidades públicas. Esta sentencia parece ignorar las diferencias abismales entre los precios de las universidades pública y privada y que las estudiantes con necesidad real de ayudas no están en condiciones de cursar sus estudios en universidades privadas (noticia de ElDerecho.com, 18/12/2020).

En primer lugar, se ha reducido un 20% el precio por crédito en primera matrícula del curso 2018/2019 (21,78€/crédito) al curso 2019/2020 (17,38€/crédito). En el contexto estatal, durante el curso 2019/2020, aun con esta reducción, el precio por crédito en Castilla y León sigue por encima de la media en España (17,03€/crédito). Es cierto que supone una mejora relativa y una buena noticia en cuanto a la paralización del brutal encarecimiento de los precios de matrícula de años anteriores. Pero, si nos remontamos algo más atrás en el tiempo, los precios siguen siendo significativamente más altos que hace 10 años (15,1€/crédito en CyL durante el curso 2009/2010). (Referencia: Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades). Es decir, que ni siquiera llega a compensar los años de recortes que ha sufrido la universidad pública en CyL durante la anterior crisis económica.

También cabe mencionar que esta bajada de tasas no se aplica a segundas, terceras y cuartas matrículas apuntalando el modelo de estudio de la excelencia académica. En el curso 2019/2020 en CyL, la segunda matrícula se ve afectada por un incremento del precio del crédito respecto a la primera matrícula del 78,8% 97 %, la tercera del 287,3% 328% y la cuarta y las sucesivas del 436,3% 493%. (Referencia: BOCyL 25/01/19). Así, un estudiante que no obtenga buenos resultados académicos tendrá más riesgo de ser expulsado del sistema educativo en función de su renta. Esta realidad contribuye a la segregación e impide el acceso del estudiantado con menos recursos a la educación superior.

En cuanto a los estudios de máster, nuestra comunidad aún se encuentra en el tercer puesto de matrículas más caras para los masters habilitantes y en el quinto para los masters no habilitantes, lo que pone en riesgo la inserción en determinadas profesiones. (Referencia: Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades).

Además del precio por crédito existen más elementos que elevan el precio de las tasas. La tarjeta de identificación universitaria, apertura, traslado, gestión y formalización del expediente, el seguro escolar, material necesario para el estudio, los costes por convalidación o las matrículas en las actividades extraescolares que oferta la universidad… etc. A todos estos gastos hay que añadir el coste de la vivienda y del transporte para las estudiantes que no pueden cursar sus estudios en su localidad familiar. Por otra parte, todas estas condiciones se agravan en un medio extenso y con pequeñas poblaciones como el de Castilla y León, donde las y los estudiantes tienen muchas dificultades por la escasez del servicio de trasporte y las largas distancias, lo cual les obliga a trasladarse a las capitales de provincia con el consiguiente coste añadido y de oportunidad, que no todas las familias se pueden permitir.

Precisamente estos últimos cursos, las condiciones derivadas del Covid-19, han agravado una brecha de clase ya existente; resultado de las carencias de un sistema educativo que progresivamente expulsa al estudiantado con menos recursos (en cuanto a tecnología, infraestructura, conexión…). Si algo queda al descubierto tras la crisis -cuya resolución en lo educativo se ha cargado en los docentes- es la falta de medios y recursos en los centros públicos.

Para la Plataforma-Foro por la Educación Pública en CyL, una educación gratuita es aquella en la que no existen trabas económicas, es decir, que rompe con la necesidad de una renta familiar elevada para el acceso a ciertos niveles de enseñanza. La gratuidad de la educación requiere de la existencia de becas y ayudas para sufragar el resto de los gastos relacionados con los estudios, así como la eliminación de cualquier tipo de tasa en las actividades formativas que realizan los centros.

Somos conscientes que las becas de estudio suponen un derecho y una ayuda para reducir la carga económica sobre el estudiantado con menos recursos, aunque su existencia no implica en ningún caso la eliminación de las barreras económicas en el acceso a la universidad. Por eso, desde la Plataforma-Foro por la Educación Pública en CyL, venimos reclamando una Universidad Pública totalmente gratuita y, en el camino para alcanzarlo, exigimos a la Junta de Castilla y León una disminución de las matrículas que nos permita pasar del 3er puesto al 7º, para estar al menos en consonancia con el PIB per cápita en relación con el resto de las Comunidades Autónomas, y una política decidida de incremento de las becas para que ninguna estudiante tenga que abandonar la universidad por motivos económicos.

Castilla y León, 11 de mayo de 2021

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(*) Ambos colectivos están formados por Alternativa Universitaria (EeM), CONFAPACAL, IU, y los sindicatos de enseñanza de CCOO y STECyL. Además, forman parte del PEPLyG, el Sector de la Enseñanza de FESP-UGT y el Frente de Estudiantes, y, del Foro por la Educación, Concejo Educativo, Podemos y PSOE.

Web. Plataforma-Foro por la EP en https://plataformapublicaforoeducacioncyl.wordpress.com/

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