Cuando se acerca el día de los derechos de la infancia de las Naciones Unidas (20 de noviembre) recogemos aquí una iniciativa surgida respecto al derecho de esta al arte y la cultura.
Gema Cienfuegos Antelo profesora de Literatura infantil ( Dpto de didáctica de la Lengua y la Literatura de la UVA), nos presenta como se plasma a través de TeVeo y en la Universidad de Valladolid a través de unas jornadas (13-15 noviembre).
Contenido
La carta delos derechos de niños y niñas al arte y la cultura
La Carta de los derechos de los niños al arte y la cultura surge a iniciativa de la compañía de teatro italiana La Baracca-Testoni Ragazzi. La edición española está patrocinada por Acción Educativa, la Unión Europea (proyecto Small Size, Big Citizens), la Università di Bologna y el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música.
Esta recoge, entre otros, los siguientes aspectos:
- Los niños tienen derecho a acercarse al arte en todas sus manifestaciones: teatro, música, danza, literatura, poesía, cine, artes visuales y multimedia.
- A experimentar con los lenguajes artísticos como “saberes fundamentales”.
- A tomar parte en procesos artísticos que nutran su inteligencia emotiva y les ayuden a desarrollar, de modo armónico, su sensibilidad y sus competencias.
- A desarrollar, a través del arte, la inteligencia corporal, semántica e icónica.
- A disfrutar de producciones artísticas de calidad, creadas especialmente para ellos por profesionales, teniendo en cuenta su edad.
Qué es TeVeo
Recogido de su web , donde se puede encontrar un desarrollo de su actividad: “La asociación TE VEO DE ARTES ESCÉNICAS PARA LA INFANCIA Y LA JUVENTUD, creada en 1996 y formada por compañías de todo el Estado, nació con el objetivo de crear un marco de referencia en el que los profesionales del teatro para niños/as y jóvenes pudieran elaborar preguntas y respuestas que sirvieran para poner en marcha proyectos orientados al desarrollo del sector y que permitieran promover acciones de mejora en la creación, producción y distribución.”
Te Veo en la UVa
En las cinco ediciones de Te Veo en la UVa hemos tratado de llevar a la práctica la convergencia, necesaria y obligada, entre los profesionales del teatro y quienes se dedican (o se dedicarán) a la educación de niños, niñas y jóvenes a fin de despertar en los futuros docentes el interés por el teatro como forma de expresión artística idónea para una educación estética multimodal e integral. ¿De qué tratamos en las Jornadas que se celebran en la Facultad de Educación en el marco de los Encuentros Te Veo?
- De que la autenticidad y el rigor no solo no están reñidos con la capacidad de llegar a todos los públicos, sino que son condición indispensable para mostrarse ante el receptor infantil, exigente, espontáneo y sincero, que rechazará la impostura por mucho que el mediador adulto (padres, abuelos, maestros, animadores socioculturales, etc.,) trate de mitigar su insatisfacción: “‒Bueno, no ha estado mal, ¿no? ¡Entretenido!” Etimología de entretener: del latín inter y tĕnēre, ‘tener asido u ocupado’; asido ‘cogido por el asa’, ‘agarrado’, ‘quedo’. O sea, quietecito y atento (¡como en las aulas!).
- Hablamos de que ese “entretenimiento” (en inglés, para que se me entienda, entertainment)no sirve a la Educación, como tampoco existe el “arte del entretenimiento” (banal expresión formulística), porque los productos de entretenimiento no son artísticos y, por tanto, su función es limitada: entretienen, divierten. El arte, en cambio, es educativo en sí mismo porque sus virtudes ‒verdad, belleza y bondad‒ nos conmueven. La literatura y el teatro para la infancia y la juventud han de tener esa cualidad artística en primera instancia, es decir, han de llevar mediante la emoción a la educación crítica, estética y ética (verdad, belleza, bondad; amplíese en Platón, Aristóteles, Santo Tomás).
- De la imprescindible formación teatral de los futuros maestros y maestras en dos dimensiones fundamentales: por un lado, como espectadores-mediadores de teatro infantil y, por otro, en las estrategias didácticas, técnicas y recursos teatrales aplicados en el aula y, también (cómo no), en el interés de ver, leer, hacer teatro.
- Hablamos de la contribución de la literatura y el teatro a la construcción del imaginario común que sirve a los niños y niñas para entender el mundo en el que viven, a comprenderse a sí mismos y a los demás.
- De la necesaria distinción entre ‘estereotipo’ y ‘arquetipo’: el primero para desterrarlo, el segundo, para entenderlo como referente del imaginario, salvaguardarlo como formulación o convención artística y subvertirlo, tal vez, en las reescrituras contemporáneas.
- Hablamos de educación patrimonial, de la literatura y el teatro como patrimonio, de la oralidad y el teatro en las aulas como forma de acercamiento a nuestros clásicos. Clásicos a la altura y al alcance de los niños, clásicos para todos. Los escolares ingleses conocen y recitan a Shakespeare, los franceses representan las obras de Molière… En nada desmerecen nuestros Lope, Cervantes o Calderón y, qué lamentable, han sido desterrados de las aulas.
- De la fertilidad creativa de los más pequeños, es decir, de su capacidad de expresar lo que le dicta su rica imaginación en todos los lenguajes artísticos sin tener consciencia aún de ello: cualquier objeto se convierte en una marioneta en la que proyectar sentimientos y vivencias, o darle vida a los cuentos; un pez garabateado puede volar entre las nubes o tomar el sol bajo unas palmeras; “‒Las olas besan las piedras de la playa”; “A, B… C ¡la luna!”
- Hablamos de que el estímulo de la creatividad innata en los niños contribuye a su desarrollo personal y emocional, a la vez que potencia su capacidad de aprendizaje.